materiales madera
(disponible en haya, boj, roble, cerezo y nogal)
medidas 70×13 mm
peso aproximado 7 g
Este modelo del péndulo de Karnak es un péndulo clásico y con un diseño muy cuidado, capaz de generar un algo nivel de energía que se obtiene gracias a su conocida forma (por la que se conoce como péndulo egipico o de Karnak). Gracias a su curvatura suave y equilibrada, este péndulo milenario irradia su propia energía, y se puede usar tanto como transmisor como receptor, lo que lo convierte en un modelo muy equilibrado, apropiado tanto para el principiante como el radiestesista experto. Por su sensibilidad y exactitud, el péndulo de Karnak puede usarse para una amplia gama de aplicaciones distintas.
Este péndulo está disponible en cinco tipos de madera diferentes: haya, boj, roble, cerezo y nogal. Cada madera le confiere un acabado y unas propiedades y simbolismo diferentes, para que puedas escoger la opción que mejor se adapte a tus necesidades.
Madera de haya: se trata de un árbol que ha tenido un papel muy importante a lo largo de la historia, pues se ha usado para fines alimenticios, medicinales, religiosos y mágicos. El haya común es un árbol de la familia de las Fagáceas, robusto y de gran talla, que puede alcanzar hasta los 35 o 40 metros. En la época clásica, el haya reresentaba a la diosa Diana, protectora de la naturaleza, y se asociaba con la fertilidad, por lo que los romanos sentían una especial devoción por este árbol. Durante la Edad Media, se le confirieron al haya numerosas propiedades mágicas, como la capacidad de intervenir en los sueños y aportar lucidez, y su madera se usó en rituales y conjuros.
Madera de boj: es una madera con una densidad de unos 900 kg/m3, una dureza de 9.0 y un grano muy fino, cualidades que la hacen muy adeucada para su uso. Los antiguos consideraban este arbusto o pequeño árbol “siempre verde” como un símbolo de inmortalidad, y era consagrado a Hades, el dios del inframundo según la mitología griega. Por otra parte, en Francia y otros países el boj se una durante la celebración del Domingo de Ramos en lugar de las “palmas” empleadas en otras regiones, dado que se considera una “prenda de victoria, resurrección e inmortalidad”. En la masontería la madera de boj se usa para hacer los malletes masónicos, y se considera que el boj es un símbolo de firmeza y perseverancia.
Madera de roble: el roble es uno de los árboles más mágicos y espirituales por excelencia. Con su imponente estatura y gran longevidad, el roble se asocia a la protección, la solidez, la longevidad, la fuerza, la sabiduría, la salud o la potencia y ha sido venerado y adorado desde tiempos prehistóricos. Para los druidas su importancia era tal que este árbol siempre se hallaba presente en sus rituales, y al tratarse de un árbol solar tiene un importante poder talismánico.
Madera de cerezo: es una madera de densidad media, fuerte y resistente, muy usada por sus propiedades en ebanistería, tornería y para fabricar instrumentos musicales. Desde la antigüedad el cerezo ha estado relacionaco con numerosas culturas. En Japón, por ejemplo, se celebra el “Hanami”, la fiesta de la “contemplación de los cerezos en flor”, cuando es tradicional que las familias salgan al campo y a los parques de las ciudades para comer y beber sake bajo estos árboles floridos. Para esta cultura el cerezo es símbolo del paso del tiempo y su floración representa la primavera o el renacer de la vida. Siglos atrás la cultura japonesa consideraba el cerezo un árbol sagrado, donde habitaban sus dioses, algo no exclusivo de esta tradición. La mitología romana relacionaba el árbol del cerezo con Venus, la diosa del amor, y con el Sol; y era considerado un símbolo de inocencia. Por otra parte, la relación del cerezo con el amor también está extendida en numerosas culturas centroeuropeas. Durante la Edad Media el cerezo estaba relacionado con lo mágico, y los hechiceros y las brujas usaban sus ramas para realizar conjuros.
Madera de nogal: esta es una de las más destacadas entre las maderas nobles. Esta madera tiene una dureza media, una gran elasticidad, es pesada y con fibra recta; cualidades que la hacen muy cotizada para piezas de gran calidad. Las propiedades del nogal y su fruto, las nueces, son innumerables, y entre ellas se cuentan las propiedades curativas y regenerativas de diversas funciones del organismo. Históricamente el nogal y las nueces han estado relacionados con cualidades mágicas aplicadas a las profecías o a la sabiduría.